"Esta monja es una mujer en la que todo es primor: los afectos personales, la devoción sincera y profunda, la imaginación que cabalga en todos los pegasos eruditos. Una mujer que siendo monja tiene hasta la coquetería de no ser santa"- Diez Canedo (cit. en Francisco González Guerrero, En torno a la literatura mexicana, 1976:46)